Audio de la conferencia de prensa sobre Mumia Abu Jamal

El Colectivo Amigos de Mumia en México dio a conocer el pasado 4 de julio de 2015 un boletin de prensa donde se narra, entre otras cosas, las condiciones carcelarias y de salud que tiene actualmemente Mumia. También se habló del reciente libro llamado "La escritura en la pared" donde se presentan escritos selectos carcelarios de Mumia Abu Jamal. Por último, se leyó la Carta abierta por la vida, la salud y libertad de Mumia.

Audio de la conferencia de prensa

Boletín de prensa

4 de julio de 2015.

A los medios de comunicación:

Escritor, periodista, luchador por los derechos de los negros y contra las injusticias del mundo, ex pantera negra… todo esto ha llevado a Mumia Abu Jamal a la prisión política durante casi 33 años, sin embargo todo aquello también lo ha mantenido vivo en la muerte del encierro. A pesar de que durante 30 años tuvo pena de muerte y, a partir de 2011, convierten su sentencia en cadena perpetua, él no ha sido indiferente a las injusticias y luchas sociales del mundo, ha hecho más de 2,000 radio ensayos y escrito 9 libros. Mumia nunca debería haber pasado un solo día en la prisión. Ahora está gravemente enfermo y su inmediata liberación es más urgente que nunca.

El 9 de diciembre de 1981, Mumia es encarcelado y condenado a muerte por el asesinato del policía Daniel Faulkner, a pesar de no tenerse pruebas claras que demostraran su culpabilidad, pero si la evidencia de testigos amenazados y sobornados para que lo culparan, además de la manipulación de los datos. Y hasta expresiones racistas dentro del jurado que evidenciaban una clara consigna contra él: “Yo les voy a ayudar a freír al negro” que fue lo que se le escuchó decir al juez Albert Sabo. Prueba de todo esto, también, es que hasta Amnistía Internacional declara en 2000 que “…el caso no reúne las mínimas garantías internacionales reconocidas de justicia procesal”. Asimismo hay una campaña mediática de difamación contra el preso que se concretó en octubre de 2014 cuando él fue invitado a enviar un discurso a la ceremonia de graduación en la Universidad Goddard en Vermont. Ésta se evidenció de nuevo el pasado abril cuando la maestra Marylin Zuñiga fue despedida de su trabajo, a instancias de la Orden Fraternal de Policía, porque sus alumnos enviaron mensajes de solidaridad a Mumia después de que se enfermó. Todo esto es muestra de la molestia que causa, no sólo la negritud de Mumia, sino también su dignidad y su lucha.

Tanto se ha acrecentado este disgusto ante él que en octubre de 2014 el gobernador de Pensilvania firmó una nueva ley anti Mumia denominada “Alivio de Revictimización”, la cual censura su discurso político y el de cualquier preso ante los argumentos de un juez de estar causando daños a las víctimas de su crimen o supuesto crimen. Esto hubiera puesto en riesgo la libre expresión de él y otros presos aunque afortunadamente la ley fue derogada por un tribunal el pasado abril por ser anti-constitucional.

El caso de Mumia es una prueba de que los derechos de los negros no existen en la democracia estadounidense, a pesar de que se pregona y se intenta demostrar, demagógicamente, con películas de Hollywood donde aparecen protagonistas negros y hasta un presidente negro. Estos falsos intentos han caído aún más con los recientes sucesos de terror policiaco contra las comunidades de color. Como es el caso de Michael Brown que en 2014 fue asesinado a tiros, Eric Garner quien, el pasado junio fue estrangulado ante la sospecha de vender cigarrillos ilegalmente, asimismo el caso de la jovencita negra que fue sometida brutalmente en una fiesta, a pesar de no haber hecho nada, todos estos sucesos llevados a cabo por los policías. Y la supremacía blanca no sólo se refleja en las propias autoridades sino en gran parte de la sociedad gringa, prueba de ello es la reciente masacre en Charleston a devotos negros, acaecido por una joven blanco que expresa palabras racistas antes de dispararles. Asimismo, la forma en que los medios manejan estos hechos también marca una clara postura de visualizar los crímenes o supuestos crímenes de negros como actos terroristas, más los de los blancos como consecuencia de problemas personales.

En este contexto se vuelve más clara la actual brutalidad contra Mumia disfrazada de enfermedad accidental, lo cual es consecuencia de la negligencia médica que sufre nuestro compañero dentro de la prisión. El pasado 30 de marzo casi muere al presentar un shock diabético. Había bajado 30 kilos, respiraba con dificultad, tenía un color negro azabache y sentía mucho dolor, a pesar de ello cuando lo sacaron del hospital, dos veces y sin avanzar a su familia, lo encadenaron a su cama y no dejaron que nadie lo visitara, además de que no dieron informes de su salud ni a sus familiares, ni amigos, ni abogados. Aunque ya está más estable en sus niveles de sangre siente mucho dolor y está en silla de ruedas. Los médicos de la prisión le habían estado dando un medicamento que le causaba muchos problemas y sólo por la presión pública se lo han suspendido, sin embargo no le dan una dieta propia para un diabético, además de que no dejan que sus médicos de confianza lo revisen y diagnostiquen.

Mumia es un preso muy reconocido mundialmente, no sólo por su larga estancia en la cárcel, sino por su trayectoria de lucha y resistencia a través del periodismo y escritura (a pesar del encierro), por su interés en saber de otras luchas, procesos sociales y otros presos del mundo, además de comunicarse con ellos.

Por eso exigimos la inmediata libertad de Mumia y, mientras pasa este proceso, que el Departamento de Correcciones cumpla con las demandas de permitir que ingrese un médico independiente para que le den un diagnóstico de su enfermedad, así como permitirle las visitas y llamadas sin restricciones. La campaña de firmas es uno de los medios para esta exigencia, pues consideramos que la vida de Mumia está en riesgo y, más que nunca, ahora debemos estar al pendiente de su caso y su situación de salud para no permitir que lo maten por medio de la negligencia médica.

Colectivo Amigos de Mumia en México.

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