Especial sobre Rio antes de las olimpiadas

Conversamos un poco sobre la situación de violencia policial y militarización de la ciudad antes de los Juegos olímpicos Rio 2016. También presentamos algunos audios de actividades llevadas a cabo en el Complexo do Alemao y en la favela de Maré. Escuchamos música de Racionais, MC Carol y Sergent Garcia. Escríbenos al correo habitacion101@kehuelga.net

Diversas actividades se han llevado en días recientes en Rio de Janeiro para denuniciar el asesinato de jóvenes negros e integrantes de sectores LGTBI. También estuvieron presentes en la ciudad integrantes de la organización de Estados Unidos Black Lives Matters, con el objetivo de compartir experiencias entre dos sociedades que albergan altísimos índices de violencia letal sobre la población afrodescendiente, así como de población carcelaria que proviene de este mismo sector de la sociedad.

Pudimos estar presentes en el Museu de Maré donde se llevó a cabo un debate sobre la realización de los megaeventos y los efectos en la seguridad pública. Ahí pudimos escuchar distintos testimonios sobre estos 10 años de transformación social en materia de segregación espacial, expulsión de población, militarización de la vida cotidiana, así como de las resistencias que han tenido lugar.

Asistimos a una movilización en el Complexo de Alemao para denunciar los efectos de los megaeventos y específicamente de las Olimpiadas en Rio de Janeiro. El evento tuvo como símbolo la utilización de antorchas manchadas de sangre para hablar de los efectos de estos megaeventos, especialmente en lo que tiene que ver con la militarización de las favelas, así como de los enfrentamientos armados de carácter cotidiano.

Escuchamos las palabras del colectivo Papo Reto y de una habitante de la favela quien habló sobre la situación actual de su comunidad.

También asistimos a la conmemoración a 23 años de la masacre de la Candelaria, ocurrida el 23 de julio de 1993 en la que policías dispararon a personas en situación de calle que dormían en los alrededores de una Iglesia, asesinando a 8 personas, 6 de ellas menores de edad. Ahí también se denunció la violencia que en Brasil se cobra todos los días las vidas de decenas de personas, al mismo tiempo que sectores poblacionales, especialmente jóvenes negros son criminalizados por el Estado.