EL FPDT Atenco convoca a la concentración en la SCJN el 13 de julio

A los medios de comunicación:
A los organismos de derechos humanos nacionales e internacionales:
A la solidaridad nacional e internacional:

Estamos aquí de cara a la historia, para refrendar ante el pueblo mexicano y los pueblos del mundo, nuestra convicción por la defensa de la madre tierra.

Como parte de la defensa legal que hemos ejercido para defender nuestro territorio contra la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, distintas comunidades adheridas al Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, hemos interpuesto diversas demandas y amparos con la finalidad principal de proteger y preservar nuestro territorio. Uno de estos Juicios de Amparo que se presentó es precisamente en contra del proyecto aeroportuario y todas sus implicaciones que tiene y está teniendo en perjuicio de los derechos humanos, sociales, culturales, económicos y ambientales de los pueblos pertenecientes a los municipios de Atenco y Texcoco.

El día de ayer, 28 de junio de 2017, el Poder Judicial de la Federación mediante el Juzgado Noveno de Distrito en el Estado de México, con residencia en Nezahualcóyotl, dentro del Juicio de Amparo 14/2015, determinó sobreseer dicho juicio, esto es, sin entrar a estudiar el fondo del asunto decidió darlo por concluido.

El hecho no es menor aunque tampoco es la primera vez que el sistema de justicia de nuestro país se inclina por la injusticia y la impunidad para favorecer intereses mezquinos que implican millonarias ganancias como lo es la obra sexenal del actual gobierno priísta, el Aeropuerto Internacional..

La mentira del gobierno federal

Antes de que el gobierno anunciara la reactivación de la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México el territorio que antes acuno el lago de Texcoco y pueblos como Atenco a orillas de ese lago, denunciamos una y otra vez las maniobras que desde el gobierno federal se operaban para despojar a las comunidades de la tierra: manipulación y compra de voluntades; corrupción de autoridades municipales y ejidales; campañas de miedo, chantaje y divisionismo; desinformación y fabricación de mentiras; la prostitución de la Procuraduría Agraria, la Comisión Nacional del Agua, la Secretaria de Comunicaciones y Transportes, entre otras instituciones del Estado que son parte del gran fraude; y ni qué decir de la represión permanente contra los que nos oponemos abiertamente contra el aeropuerto de muerte.

Después de que el gobierno federal de Enrique Peña Nieto anunciara oficialmente la construcción del aeropuerto en septiembre de 2014, la embestida escaló y todo lo anterior que aquí mencionamos, se agudizó al interior de los pueblos, y hoy tenemos un tejido social más agraviado.

Mientras Enrique Peña Nieto aseguraba que nuestro territorio no sería afectado pues la construcción de la obra aeroportuaria sería en territorio federal, sus operadores hacían todo lo posible para comprar a nuestra gente, para infiltrar asambleas ejidales de usureros dispuestos a entregar la tierra de los abuelos, y así, traicionando al pueblo y violando los derechos humanos y las propias leyes -la agraria, la constitucional, convenios internacionales como el de la OIT en su artículo 169, por ejemplo- los tres niveles de gobierno y a la cabeza el federal, le fueron abriendo paso a las empresas que hoy están invadiendo y ocupando nuestro territorio.

Los terrenos donde se impone la autopista Texcoco-Pirámides, alterna a la barda perimetral del aeropuerto y parte de ese polígono que el gobierno y las empresas afirman “ya son propiedad de éstas”, en realidad son tierras comunales y ejidales que pertenecen a los pueblos; el peaje, para trasladar los materiales de construcción extraídos de los cerros de otras comunidades, que pretenden imponer sobre las calles de los pueblos con grupos de choque que incluso se atreven a cobrar a los transportistas y golpear y amedrentar a los vecinos afectados que se oponen; las asambleas ejidales donde se ha impuesto la modificación de la propiedad social de la tierra para convertirla en propiedad privada y todo el veneno que el gobierno federal ha desencadenado en las comunidades, echan por tierra la mentira de que nuestros pueblos no serían afectados por el gran negocio aeroportuario.

En Atenco y toda la rivera de Texcoco, se comete un despojo bestial. El saqueo y destrucción de cerros y pueblos sí existe, por eso es que no hemos dejado de movilizarnos, por eso es que nos seguimos organizando y ejerciendo el derecho a defender de manera legal y legitima nuestro territorio.

La sentencia que ha dado el juez del Noveno de Distrito en el Estado de México, definitivamente es un revés en la impartición de justicia, y eso nos coloca en una situación más adversa, pero por ningún motivo renunciable.

Hace casi un siglo, nuestros abuelos lograron la restitución de sus tierras arrebatadas en la Conquista española. Les devolvieron tierras yertas y fue su trabajo, su sudor y su amor lo que transfomó esa soberanía suya a la orilla del agua, en tierras fértiles que hoy nos siguen dando para comer, para vivir, para respirar, para sembrar a nuestros muertos y sembrar el futuro para nuestros hijos y nietos. Hoy de un zarpazo legal pretenden los dueños del dinero que nos arrodillemos ante la derrota. Una vez más les reiteramos que no vamos a entregarles a nuestra madre tierra, y conscientes estamos que eso prolonga aun más la batalla que en lo que va de este siglo, ya suman 17 años, sin contar los más de 500 que dieron nuestros abuelos.

Están pendientes otros amparos y recursos legales, mientras tanto la defensa legal interpondrá el Recurso de Revisión en contra de dicha determinación y por las características especiales del caso pediremos que la Suprema Corte de Justicia de la Nación ejerza la facultad de tracción, para que lo resuelva.

Por lo anterior CONVOCAMOS:

A LA CONCENTRACIÓN EN LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA EL 13 DE JULIO A LAS 12 HORAS, en la Ciudad de México.

EMPLAZAMOS AL GOBIERNO FEDERAL A UN DIALOGO DE CARA A LAS COMUNIDADES AFECTADAS POR LA IMPOSICIÓN DE NAICM Y EXIGIMOS EL CESE DE LAS AGRESIONES DE LOS GRUPOS DE CHOQUE Y LA INVASIÓN DE NUESTRO TERRITORIO.

FRENTE DE PUEBLOS EN DEFENSA DE LA TIERRA

¡LA TIERRA NO SE VENDE, SE AMA Y SE DEFIENDE!