respeto a la autodeterminación del pueblo indígena Nanncue Ñomndaa

Exigen justicia y cese a la persecución a integrantes de Radio Ñomndaa

Chilpancingo, Guerrero, a 21 de febrero de 2011.- Durante la audiencia de vista que el día de hoy tuvo lugar ante el Tribunal Superior de Justicia del Estado de Guerrero, la cual tiene el objetivo de revisar la sentencia emitida en contra de David Valtierra Arango y Silverio Matías Domínguez, defensores de los derechos humanos y derechos colectivos del pueblo Nanncue Ñomndaa en Suljaa’ (Xochistlahuaca) e integrantes de la Radio Ñomndaa, así como de Genaro Cruz Apóstol ex comisariado ejidal de Xochistlahuaca, se realizó una concentración a las afueras del Palacio de Justicia, donde diversas organizaciones como el Taller de Desarrollo Comunitario, la Red Guerrerense de Organismos Civiles de Derechos Humanos, entre otras e individuos, demandaron una revisión imparcial e independiente de la apelación hecha por la defensa de los acusados.
El Tribunal Superior de Justicia del estado de Guerrero, con sede en Chilpancingo, revisará la decisión de la causa penal 110-III/2004 por privación de la libertad, decidida en contra de Silverio Matías Domínguez, David Valtierra Arango y Genaro Cruz Apóstol.
Las y los presentes destacaron que, dicha resolución fue determinada en un marco de irregularidades y alejada de los principios al debido proceso por el juez Derly Arnado Alderete Cruz, de la Instancia del Ramo de lo Penal con sede en Ometepec, perteneciente al Distrito Judicial de Abasolo, en la cual no se tomó en cuenta plenamente las pruebas aportadas por la defensa, incluyendo el hecho de que el supuesto agraviado, el Sr. Narciso García Valtierra en su declaración, que constata en las diligencias, de su propia voz dice no conocer a los acusados y que no lo privaron de su libertad.
Durante esta concentración a las afueras del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Guerrero, se dio a conocer un pronunciamiento de solidaridad y apoyo a la Radio Ñomndaa en el cual, diversos académicos, artistas, religiosos y organizaciones indígenas, sociales, civiles y populares manifiestan su condena por el proceso judicial contra integrantes de Radio Ñomndaa. Dicho pronunciamiento se dio a conocer durante la concentración a través de una radio bocina la cual se enlazó por internet con varias radios comunitarias de México y el Mundo, entre ellas la propia Radio Ñomndaa, lo que permitió escuchar en directo a los pobladores de Xochistlahuaca, las concentraciones en la ciudad de México y Chilpancingo.

La carta de solidaridad exige que se cancelen las órdenes de aprensión contra habitantes de Suljaa’, así mismo instan al gobierno federal y estatal de Guerrero, respete lo que dispone la Declaración de los Derechos Humanos de los Pueblos Indígenas de las Naciones Unidas, que reconoce la autonomía y autodeterminación de los pueblos indígenas, así como del convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Declaración de sobre Principios de la Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos.

Una comisión representativa de los comités de la Radio Ñomndaa, de diversas comunidades de los municipios de Xochistlahuaca, Tlacoachistlahuaca y Ometepec, entregaron una carta dirigida al Presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Guerrero Edmundo Román Pinzón, en la que exigen alto a la represión, impartición imparcial de justicia y respeto a la autodeterminación de los pueblos indígenas en los términos del Convenio 169 de la OIT.

Por su parte el comisariado de los bienes ejidales de Xochistlahuaca también entregó una carta dirigida al Presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Guerrero, donde exige libertad y cancelación de las órdenes de aprensión en contra de 11 ejidatarios y autoridades tradicionales de Xochistlahuaca, quienes también están acusados dentro de la misma causa penal.

Habrá que recordar que, después de más de seis años de proceso y a pesar de las múltiples pruebas aportadas, el 27 de septiembre de 2010 el Juzgado Mixto de Primea Instancia con sede en Ometepec, emitió sentencia condenatoria de 3 años y 2 meses de cárcel y el pago de una multa de mil 753 pesos, en contra de Genaro Cruz Apóstol, Silverio Matías Domínguez y David Valtierra Arango. De este modo, el sistema de procuración e impartición de justicia de Guerrero criminalizó de nueva cuenta la lucha por la autonomía del pueblo Nanncue Ñomndaa.
Se acentuó que, durante todo el proceso en la Primera Instancia, no han sido considerados los derechos colectivos a los pueblos indígenas, vigentes en la Constitución y en tratados internacionales; e incluso que, dicho proceso ha estado enmarcado desde el 2004, en un contexto de hostigamientos y criminalización en contra de los defensores de los derechos colectivos de los pueblos indígenas Nanncue Ñomndaa, por impulsar la defensa de su territorio, sus usos y costumbres y exigir justicia ante las violaciones a los derechos humanos y colectivos cometidos por autoridades cacicales de la región Costa Chica.
Con estas acciones se ejemplifica como el sistema de justicia atiende, sirve y se colude con las autoridades de forma parcial. Es evidente en este caso, que el sistema de procuración de justicia responde a la presión de grupos de poder, no es imparcial, lo cual constituye una debilidad en diversas instancias en el estado de Guerrero, pues atienden a grupos caciquiles y de poder. No resuelven conforme a derecho ni tampoco analizan los casos de esa manera. 
Así también se recalcó que, la criminalización de la protesta social, así como la persecución a los defensores David, Silverio y Genaro, implica de manera directa una forma de coartar la libertad de expresión y acceso a la información de la comunidad indígena Nanncue Ñomndaa, pues los defensores acusados, son parte activa de la Radio Comunitaria Ñomndaa, La Palabra del Agua, actividad que mantiene visibles a los defensores, convirtiéndolos en objeto de la embestida de quienes ven afectados sus intereses, a raíz de la búsqueda de autodeterminación del pueblo indígena que habita el territorio Suljaa’.

Centro de Derechos Humanos de la Montaña, Tlachinollan.