Vía Democracy Now:
Desde que asumió el cargo, y ya no solo a través de Twitter, el presidente Donald J. Trump no ha dejado de emitir órdenes ejecutivas y memorandos presidenciales. El martes, sus pronunciamientos se refirieron a los oleoductos Keystone XL y Dakota Access. Ambos proyectos fueron rechazados o retrasados por el gobierno de Barack Obama, tras grandes protestas de la población en ambos casos. Ahora, con las acciones del gobierno de Trump, respaldadas por un Congreso servil con mayoría republicana, los megaproyectos de combustibles fósiles están recibiendo luz verde otra vez. Sin embargo, se necesita algo más que la acción veloz de la pluma de Trump para sofocar la vigorosa resistencia a estos dos oleoductos y al creciente movimiento mundial que demanda medidas urgentes para combatir el cambio climático.