A días de concluir su paso por la Presidencia de la República, el gobierno de Enrique Peña Nieto deja al país sumergido en homicidios y en la violencia del crimen organizado, consecuencia de su fallida estrategia de seguridad. Los números lo comprueban: EPN superó la cantidad de asesinatos registrados en el sexenio de Felipe Calderón. Para los expertos, el fracaso del priista en la materia se suma a la falta de combate y complicidad con el narcotráfico de los gobiernos locales, como el caso de Baja California y Tijuana, administrados por el PAN
Nos llegan los mensajes de Magos Rebelde y de un compa de la UNAM